Cuando juzgo...
Me ha costado años, muchos años darme cuenta de esto, pero desde mi punto de vista ¡este aprendizaje es brutal! Sí, con estas palabritas te lo digo.
¿ Te has planteado alguna vez, que cuando estás juzgando te estás perdiendo la vida? Si, te explico.
Cuando nuestra mente está haciendo juicios de valor sobre lo que ocurre, sobre los demás o también respecto a uno mismo está dejando de sentir. No permitiéndonos estar presentes ante lo que ocurre.
Estás en otro plano: el del pensamiento, perdiéndote todo el percibir y el sentir del momento. De forma que dejamos de estar presentes, de estar aquí y ahora que es lo único que existe. Es lo que nos da la vida y nos nutre.
Te propongo juegues a pillarte "juzgando". ¡Nos encanta juzgar!
El modo adulto, creo que nos hace poner el automático del juicio y nos hace olvidarnos de sentír.
Pensamos y juzgamos hasta cuando aparentemente estamos escuchando! Somos tan listos, que en vez de escuchar, nos preparamos para ver lo que queremos decir o evaluar hasta qué punto estoy o no de acuerdo con lo que el otro dice. En vez de abrir la mente y escuchar, sin más!
¿Te apuntas a sentir, percibir, escuchar y no juzgar?
Cuando juzgo me estoy perdiendo parte de la vida - retuitéalo
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