¿Esperando al fin de semana como agua de mayo?

¡Estas esperando que llegue el fin de semana como agua de mayo!

¿Eres de los que vive toda la semana imaginando el viernes? ¿Anhelando el finde? ¿Contando ya queda un día menos para el deseado descanso y hacer lo que quiera en mi tiempo libre?

Basta ya!

¿Qué te estás perdiendo? ¿Para qué estas demorando la vida que te mereces vivir? Creerás que no es posible, pero se puede! Se puede disfrutar de la semana si o si.

Se puede disfrutar del lunes y de cada uno de los momentos de la semana ¿Y qué hace falta?

1º creer que es posible, es decir, tomar conciencia que la batuta la llevas tú. Que tú eres el que decides cómo vives, cómo interpretas, qué significado das a lo que ocurre y como reaccionas ante ello. Esto depende si o si de ti.

Quizás me dirás ¡si claro parece muy fácil pero con el trabajo que tengo, la presión que recibo de mis jefes, clientes... después la casa, los hijos... Esto es imposible!

Si tomas conciencia de cómo interpretar lo que ocurre te darás cuenta si estás sufriendo de forma innecesaria o no.

2º Te propongo elijas una situación que no te gusta de tu día a día. Una situación en tu trabajo o en otro ámbito, que te daña, que te duele, te altera o te preocupa.

Identifícala con claridad. Y analiza por qué.

Y ahora que tienes todos los datos sobre la mesa, te sugiero los escribas y pregúntate: ¿Creo que todo el mundo reacciona de la misma manera que yo? Si hay alguien que no lo hace ¿Qué hace distinto? ¿Qué puedo aprender de ello? Con esta información ¿qué podría hacer ahora diferente?

Imagina que consultas a la lámpara de Aladino ¿de qué otra forma podré interpretar esto para sufrir menos o incluso no sufrir? ¿Qué te dice? seguro que otras formas probablemente más saludables que la que estás utilizando hasta ahora.

¿Sigues pensando que esto es muy difícil, que es teoría, que el día a día no es tan fácil? pregúntate ahora ¿Por qué te resistes? ¿Qué te impide aceptar que alguna de estas soluciones que has encontrado te podría ayudar?

Respóndete desde el corazón. No te engañes. Es algo que sabemos hacer muy bien engañarnos a nosotros mismos. Si quieres avanzar y crecer deja de engañarte y vuelve a preguntarte ¿Qué te mantiene en esa actitud firme y rígida de "yo llevo razón" a pesar de lo que estás sufriendo?

Plantéate ¿qué beneficios te reportan mantenerte firme en esa posición? A veces, perdón! Siempre hay beneficios encubiertos que no vemos. Búscalos y encontraras tus razones.

Y ahora ¿cómo lo ves?

Me encantará conocer tu opinión al respecto para seguir profundizando en el próximo post